El Husky Siberiano es un perro mediano que puede llegar a tener una altura de entre 50 y 60 cm de altura. Su peso puede alcanzar entre los 20 y 35 kg. Este perro puede resistir muy bajas temperaturas, lo que no significa automáticamente que pueda quedarse afuera con temperaturas bajo cero durante un lapso largo de tiempo.
Esta es la historia de un Husky llamado Cloud, que vivía expuesto a temperaturas muy frías de forma continua. Estaba encadenado y tenía que vivir afuera en una ruina. Su vida cambió gracias a un accidente que le tenía planeado el destino. Desde ese momento, su vida hizo un giro inesperado.
1. El Husky Siberiano
Los Huskies son perros clásicos del hemisferio norte. Pueden desarrollarse junto a los humanos, pero requieren una determinada y minuciosa orientación desde muy temprana edad. Son un poco tercos, pero demuestran tener mucha inteligencia y ser muy independientes. Son animales que gustan de correr, lo que a veces hace que ese gusto prevalezca sobre el cariño por su amo. Son perros muy amigables tanto con los adultos como con los niños.
Generalmente, la mayoría de los Huskies no tienen problemas con otros perros, sobre todo con aquellos con los que fueron criados. Tienen un gran instinto de caza, pudiendo atrapar a gatos y animales de granja sin problemas.
2. Abandonado en el frío
Era un día normal en Nueva Filadelfia, Pensilvania, cuando los rescatistas recibieron una llamada de un potencial derrumbe de una casa en esa ciudad. Al llegar, la casa ya se había derrumbado. Pero lo único que encontraron en ese lugar fue a un solitario Husky atado a una cadena pesada.
El estado de Pensilvania es conocido por poseer leyes estrictas para el cuidado de animales. Es terminantemente prohibido mantener a un perro fuera y encadenado por más de nueve horas. Este reglamento cambia según la estación del año. En invierno, al bajar extremadamente la temperatura, un perro puede estar por el máximo de 30 minutos afuera.
3. Condiciones insostenibles
Este Husky Siberiano llamado Cloud, estaba siendo ilegalmente encadenado. Además de esto estaba forzado a estar entre sus propios desechos. Su refugio era un simple techo de camión en horrendas condiciones y casi destrozado. Las condiciones en la que vivía el Husky eran lamentables e insalubres.
Cuando los rescatistas llegaron al refugio de Cloud, presumieron que el perro había estado casi toda su vida encadenado. Los hombres simplemente entendían del tema: eran los rescatistas de la SPCA de Hillside. Los propietarios del Husky, los cuales reconocieron estar infringiendo las leyes del estado, lo entregaron a los rescatistas del SPCA.
4. Estado físico preocupante
Los rescatistas quedaron conmocionados al tener su primer encuentro con Cloud. El animal estaba en un estado calamitoso. Los dueños del Husky habían roto todas las reglas. Estaba haciendo mucho frío afuera, la superficie donde se encontraba estaba cubierta de nueve y de excrementos del mismo perro. Y aunque tuviera su refugio precario, este no lo protegía lo suficiente.
Cloud había sido encontrado en una situación deplorable. Era un perro triste, con pelaje extremadamente enredado y desordenado y su estado de delgadez era preocupante. Además tenía una masa en su trasero que era extraña. Por estas razones, Cloud fue llevado al veterinario de la SPCA para ser examinado.
5. Pidiendo ayuda
Después de hacerle el chequeo a Cloud se supo que la masa en la parte trasera era un tumor. Debido a su edad avanzada, el tumor no era seguro de operar. El veterinario además le diagnosticó sordera.
La vida del Husky en el refugio no fue fácil – tuvo problemas para mejorar y sentirse mejor. Cuando estaba despierto, caminaba y caminaba hasta caer desmayado. Luego, al despertarse, comenzaba otra vez con su caminata y caía. Era un ciclo sin terminar. El refugio no sabía qué hacer con él, así que decidieron buscar ayuda: contactaron a Eleanor Garrett para preguntarle si lo podía adoptar.
6. Comportamiento extraño
Eleanor estaba desconcertada. Ella había visto perros en todo tipo de condiciones. Pero según su opinión, Cloud no estaba actuando como un perro. Para ella, el Husky era un desastre. El animal se topaba con todas las cosas. Eleanor comenzó a pensar que Cloud nunca había estado dentro de una habitación en su vida.
Ella quería a Cloud y lo quería ayudar. Estaba contenta de poder darle un hogar pero su amor no bastaba para curar al Husky. El animal también era muy desconfiado, sobre todo con las personas y hacía todo lo que podía para evadir a Eleanor y sus tres hijos.
7. El primer signo de amor
Cloud no tenía ningún interés en interactuar con la familia. Si alguien procuraba acercársele, Cloud buscaba el más próximo resguardo. En un momento Eleanor estaba recogiendo algo cuando de repente siente un pequeño golpe en su pie. Miró hacía abajo y vio que ¡era la pata de Cloud! El Husky estaba tocándola con una pata para que ella se sentara y lo acariciara.
Eleanor no pudo resistir al pedido. Tomó asiento en el piso y comenzó a acariciarlo. Cloud comenzó a darle besos. Cada vez que ella se detenía, Cloud le pasaba otra vez su pata para recordarle que quería cariño.
8. Aprendiendo hábitos
Después de pedir caricias, parecía como que el Husky se empezara a dar cuenta de que estaba a salvo y que los humanos alrededor suyo eran amigables. A partir de ese día, la convivencia con Cloud se empezó a mejorar diariamente.
Aun así, el animal tardó un tiempo en comprender el funcionamiento de las cosas. Por ejemplo, Cloud no sabía que tenía que regresar a la casa después de que saliera afuera. Pero fue en un determinado momento que se dio cuenta que deseaba estar adentro de la casa. A partir de ese momento, las veces que salía afuera al baño, regresaba a la puerta y se sentaba a esperar para entrar.
9. Buscando una familia
La recuperación de Cloud no fue sólo gracias a Eleanor, sino que fueron sus seis perros también quienes tuvieron mucho que ver. De alguna manera, los otros caninos le enseñaron al Husky a “convertirse” en perro y actuar como tal.
La tenencia de siete perros era muy desgastadora para Eleanor. A pesar de amarlo mucho, ella no había planeado quedarse con él. La tenencia de todos era muy intensa para ella. Cuando supo de una pareja que estaba interesada en el Husky, se alegró mucho. Se encontraron para conocerse primeramente y la conexión entre las partes fluyó espontáneamente para alegría de todos los involucrados.
10. Amor a primera vista
Cuando el señor quiso agacharse para saludar a Cloud, este se levantó y lo empezó a besar. Con este gesto, el perro compró al hombre que se lo quiso llevar enseguida con él. Estaba seguro que se lo quería llevar consigo. Y fue así como el Husky se mudó con su familia nueva al pasar una semana de su primer encuentro con ella.
Al comienzo, la pareja tenía sus dudas sobre si se iría a acostumbrar a la vida con ellos. Pero Cloud se sintió enseguida como en su casa y se adaptó a la forma de vida casi inmediatamente. La pareja también intento siempre darle lo mejor posible para que se sienta bien y olvide su anterior sufrimiento.
11. Lo mejor es sentirse querido
La pareja planeaba todo tipo de actividades para el Husky: pasear y salir con él asiduamente, sesión de fotos, masajes especiales. También le consiguieron una cama ortopédica grande. La vida de Cloud mejoraba lentamente después de haber sufrido tanto.
Finalmente Cloud obtuvo la seguridad y el amor que tanto necesitaba y que desde muy temprana edad le habían impedido tener. El destino le había sonreído al fin y le había puesto en su camino un hogar con el que se sentía seguro y amado. Esto era con lo que todo perro sueña en su vida. ¡Y Cloud lo había logrado!
