Todos conocemos los amores que nacen en los primeros años de la niñez. Algunos se olvidan con el tiempo mientras que otros perduran toda la vida. Los amores preescolares son lo más puros, sinceros e inocentes. Desfortunadamente ellos terminan generalmente después de cerrar la etapa escolar.
Esta es la historia de Laura Scheel y Matt Grodsky, quienes se conocieron por primera vez en el jardín de infantes teniendo tan sólo dos años de vida. En ese instante hubo una conexión extraordinaria entre los dos. A continuación te contaremos la conmovedora historia que vivieron Scheel y Grodsky después de haber estado separados por décadas.
1. Amistad inocente
Hace 25 años, Laura Scheel y Matt Grodsky se vieron la primera vez en el mismo jardín de infantes. Este quedaba en Phoenix, Arizona, y ambos tenían en ese entonces dos años. Al poco tiempo de conocerse, terminaron convirtiéndose en muy buenos amigos. Ninguno de los dos entendía la amistad tan profunda que habían construido.
Grodsky no puede recordar exactamente cuándo fue que vio a Scheel la primera vez. Pero lo que sí recuerda exactamente es que se sintió enseguida atraído por ella. Él la seguía y a ella no le parecía molestar mucho. Tanto fue así, que los padres y maestros notaron el acercamiento enseguida.
2. Siempre de a dos
Estaban siempre tan cerca que todos lo percibían, pero al fin y al cabo imaginaban que era una simple amistad, sincera e inocente. Grodsky se sintió muy atraído a Scheel desde el primer día, y ella disfrutaba muchísimo de su humor y compañía. Y con el tiempo se fue dando cuenta de que también tenía otras cualidades: era muy cariñoso y también entretenido.
Desde ese momento, ninguno de los dos pudo separarse del otro. Se «engancharon» de tal manera que hacían todo juntos: jugar al escondite o mantenerse despiertos durante la hora de la siesta: todo era de a dos.
3. Salidas en complicidad
Tanto Scheel como Grodsky empezaron a darse cuenta de que querían pasar más tiempo juntos. Fue así que cuando el jardín de infantes comenzó a organizar salidas, ellos ya sabían a quién querían elegir para las excursiones como compañero.
Ambos disfrutaban mucho jugando y disfrutando del tiempo juntos. Por haber sido elegido por Scheel para acompañarla en la salida, Grodsky se aseguraba siempre de que Scheel se divertiera a lo grande. Hasta que llegó un día en que comenzaron a tomarse de las manos, también fuera de los paseos. Tanto maestros como padres comenzaron a sospechar de que podría tratarse de una dulce pareja de preescolares.
4. Compartiendo más tiempo juntos
Las estrategias de Grodsky para llamar la atención de Scheel eran variadas. La primera era hacer todo lo posible para hacerla reír y haciéndolo con alegría. Pero había otra técnica que le era infalible: recitar películas. La favorita de Scheel era El Rey León y Grodsky procuraba siempre recitarla para impresionarla.
Por su parte, Scheel también le enseñó a Grodsky a divertirse con los columpios, a dibujar montañas ondulantes y a comer queso. Ambos comenzaron pronto a querer pasar más tiempo juntos en sus tiempos libres fuera del jardín. A medida que pasaba el tiempo, los padres de ambos niños empezaron a hacer actividades los fines de semana: cine, juegos, salidas.
5. La promesa sentimental
Scheel y Grodsky se volvieron inseparables. A medida que pasaba el tiempo, los padres de ambos se dieron cuenta de que la relación de los niños iba más allá de la amistad. A esta altura, ambos niños tenían cuatro años. Sin embargo, esto no era impedimento para que Grodsky no tuviera las cosas claras.
Estaba convencido de que había que expresar sus sentimientos así que un día, se paró delante de sus compañeros de clase, y le expresó su amor a Scheel. Sus compañeros no lo tomaron en serio. Pero Grodsky aseguró de que solamente tenían que darle tiempo. ¡Nadie podía predecir en ese momento lo que sucedería dos décadas más tarde!
6. Nueva etapa para ambos
Durante toda su etapa preescolar, tanto Scheel como Grodsky disfrutaron al máximo de su amistad. Hacían casi todo de a dos y querían estar juntos todos los fines de semana. El tiempo en el jardín de infantes llegaba a su fin. El tiempo había volado y los padres de ambos comenzaban a pensar en el siguiente capítulo de sus hijos: la guardería.
Era una nueva etapa para los niños: ¡conocerían gente nueva y cosas nuevas! Tanto a Scheel como a Grodsky no se les pasó por la cabeza separarse. Ambos estaban seguros de que seguirían juntos en esta nueva etapa. Hasta que el destino cambió sus vidas.
7. Primer obstáculo
Los niños dieron por claro que sus padres sabían lo que ellos querían: no separarse. Sin embargo, ambos fueron sorprendidos porque sus respectivos padres tenían planes muy diferentes para ellos. Ambos irían a distintas guarderías. Y al tratarse de solamente la opinión de “niños”, no pudieron hacer nada para que esto no sucediera.
Ninguno de los padres se imaginó que la separación pudiera afectar tanto a sus hijos. Al fin y al cabo, ellos habían tomado las mejores decisiones para sus niños y tendrían que adaptarse a su nueva forma de vida. Tanto Scheel como Grodsky estaban convencidos de que su amistad sobreviviría este nuevo desafío.
8. Navidad como único contacto
Tanto Scheel como Grodsky intentaron con todas sus fuerzas mantenerse juntos. Procuraban encontrarse todos los fines de semana pero esto se iba poniendo más difícil a medida que los niños iban creciendo. Cada uno se iba preparando sin saberlo para su propio destino. Scheel Y Grodsky se continuaron encontrando hasta el año 2000.
Los niños se habían ido acostumbrando lentamente a tener cada vez menos contacto. Cuando ambos comenzaron la escuela, habían perdido totalmente el contacto. Ambos habían crecido y sus vidas se iban encaminando en diferentes sentidos. En los próximos siete años su contacto sería sólo a través de las tarjetas de Navidad entre sus padres.
9. Cada vez más distanciados
A pesar del intercambio de tarjetas entre las familias una vez al año, la información de los niños entre sí era muy escasa y esta no compensaban su amistad. Igualmente y a pesar de la distancia entre ellos, ambos se recordaban y se tenían presente. Pero la vida los fue separando cada vez más.
Entre la escuela, las tareas diarias, los nuevos amigos y la familia, tenían mucho a que dedicarse. Las tarjetas de Navidad ya no eran esperadas tan ansiosamente para ver la foto de su mejor amigo. Y sin darse cuenta, fueron decidiendo concentrarse en su presente a pesar de echarse terriblemente de menos.
10. Aceptando el destino
El destino les empezaba a jugar en contra. Parecía lentamente que el tiempo que habían pasado juntos en el jardín hubiera sido hace millones de años atrás. Cada uno comenzó a entablar nuevas amistades y recorrer su propio camino. Un nuevo período en sus vidas comenzaba con la graduación en la escuela y el comienzo de la secundaria.
Como todo adolescente, ambos estaban muy ansiosos por empezar esta nueva etapa de sus vidas. Seguir creciendo y conociendo nuevas personas les ponía diariamente nuevos retos que ellos estaban contentos de afrontar. Sus destinos continuaban suciendo paralelamente y parecían no tener ningún punto de encuentro en el futuro.
11. Vidas paralelas
Scheel estaba un día junto con una amiga cuando sucedió algo impensable: Scheel miró eventualmente el celular de su amiga y vio un nombre que le era muy familiar: era el nombre de Matt Grodsky que aparecía como contacto en su lista de conocidos. Scheel quedó muy sorprendida y le preguntó inmediatamente de dónde se conocían y por qué razón tenía su número.
Efectivamente, su amiga había ido con él a la secundaria. Luego se tuvo que mudar y coincidió con Scheel en la secundaria. ¡Era como si el destino hubiera querido volver a establecer un nexo entre los dos amigos del jardín de infantes!
12. El nexo amigo
Luego de investigar de dónde se conocían, Scheel decidió contarle a su amiga el vínculo que tenía con Grodsky y cómo había disfrutado del jardín de infantes junto a él. Cuando la amiga escuchó toda la historia, supo enseguida que tenía que actuar y unir a los dos nuevamente.
Scheel no estaba muy convencida. Estaba en el primer año de secundaria y pensó que no sería una buena idea. Pero su amiga no se dejó convencer y le pasó a Grodsky el número de Scheel para que comenzaran a relacionarse como en los primeros tiempos. Al recibir el número, Grodsky le envió un mensaje de texto a Scheel.
13. La primera cita
Después de recibir el mensaje de Grodsky, ambos acordaron en ir juntos al cine, como lo hacían anteriormente. Scheel estaba muy nerviosa, pero tampoco podía negar que se sentía emocionada al volver a ver a Grodsky después de tanto tiempo.
En cuanto se reencontraron, se dieron cuenta de que parecía como si el tiempo no hubiera pasado entre ellos. ¡Nada había cambiado! Al encontrarse se llevaron bien e inmediatamente comenzaron a reírse como en los viejos tiempos. Entre ellos parecía estar todo como antes. Sin embargo, algo parecía ser extraño entre los dos: ambos sintieron una atracción mutua muy intensa.
14. Los sentimientos intactos
La atracción fue tan fuerte, que tan sólo dos semanas después de reencontrarse, comenzaron a hacer oficial su relación. A pesar de estar en escuelas diferentes, ambos estaban dispuestos a hacer funcionar su relación a pesar de los obstáculos que tuvieran.
Durante toda la secundaria, Scheel y Grodsky se volvieron inseparables como en los viejos tiempos. Aprovechaban el mayor tiempo posible para estar juntos. Ambos visitaban las fiestas de las dos escuelas y lograron de esta manera convertirse otra vez en el dúo inseparable del jardín de infantes. Pero ambos tenían todavía un nuevo desafío por delante: la secundaria se terminaba y el comienzo de los estudios universitarios estaba cada vez más cerca.
15. Separados nuevamente
El tiempo pasó y los novios comenzaron la universidad. Scheel había decidido ir a la Universidad del Norte en Arizona, mientras que Grodsky decidió ir al Columbia College en Chicago, teniéndose que mudar a más de 1.600 km. Esta situación ponía en dificultades a la pareja, que quedaba separada pero esta vez viviendo en diferentes estados.
Todos conocen lo difícil que es mantener una relación a distancia. ¡Pero ambos estaban dispuestos esta vez a hacerla funcionar! Ya habían experimentado un distanciamiento y sabían a lo que se enfrentaban. Durante la secundaria habían tenido su primer desafío al estar separados, así que ya sabían lo que les esperaba.
16. Sentimiento de pertenencia
Ambos universitarios estaban muy convencidos de que vencerían la distancia. La pareja había organizado un determinado horario para encontrarse por FaceTime y también por otras redes sociales. De esta manera permanecían continuamente en contacto.
El tiempo pasó y la pareja superó el primer año universitario. Pensaron que si habían sobrevivido el primer año, sería posible seguir. El tiempo máximo que estuvieron separados fueron veinte semanas. Pero a pesar de esto, supieron sortear este desafío. Después de vivir esta experiencia, quedó demostrado que Scheel y Grodsky se pertenecían el uno al otro. Si bien ambos estaban totalmente integrados a sus respecitvas vidas universitarias, también visitaban ambos campus frecuentemente.
17. Sorpresa romántica
A pesar de que Scheel y Grodsky estuvieron muchos meses separados, ambos terminaron el primer año universitario muy rápidamente. Sin pensarlo, los próximos dos años también pasaron de una forma vertiginosa. Ambos tenían tan sólo el último año universitario por delante.
Fue en ese momento que Grodsky no quiso dar por sentado la relación de ambos. No estaba dispuesto a permitir que el destino los separara otra vez. Era el último año de la universidad y quería que fuera un año especial para Scheel. Entonces tomó una decisión que la tendría que haber tomado mucho antes. ¡Sería una sorpresa que nunca olvidaría!
18. Comportamiento extraño
Grodsky estaba dispuesto a darle una inolvidable sorpresa a su novia. Fue así que organizó un picnic para festejar ese día extraordinario. Pero en realidad tenía también otra sorpresa además del picnic. Ambos viajaron hasta el jardín de infantes donde todo había comenzado. Scheel no había notado nada, a no ser por la manera extraña en la que se comportaba Grodsky.
Scheel se dio cuenta de que Grodsky estaba muy ansioso, nervioso y comenzaba a sudar. Normalmente Grodsky procuraba hacerle reir, pero esta vez estaba muy callado e inquieto. Igualmente Scheel no pudo darse cuenta de lo que estaba pasando.
19. El momento más esperado
Lo que Scheel no sabía, era que Grodsky había estado planeando ese gran día desde hacía varios meses. Un par de meses antes, Grodsky había recibido la bendición de los padres. A continuación había comprado un anillo de compromiso. Todo estaba minuciosamente planeado.
El hermano de Grodsky esperaría en el jardín de infantes para filmar el pedido de compromiso. En una canasta para picnic que el propio padre de Grodsky había utilizado para proponerle matrimonio a su madre, puso revistas especializadas en bodas, sidra y algo para picar. Lo único que faltaba ahora era que Grodsky se arrodillara delante de Scheel.
20. Volviendo a las raíces
¡Por fin había llegado el momento que Grodsky había esperado tanto! En cuanto llegaron al jardín, Scheel se sintió muy emocionada. Después de tantos años habían vuelto al lugar donde todo había comenzado. Pero todavía faltaba lo mejor. En un determinado momento, Grodsky se arrodilló ante ella y le preguntó si quería casarse con él.
Scheel estaba tan sorprendida que no estaba segura de lo que estaba aconteciendo. Pero después de ver el anillo, que por cierto lo gustó mucho, su respuesta fue un claro “sí”. A partir de ese momento soñado, Schell y Grodsky estuvieron un año y medio planeando su boda.
21. Cumpliendo la promesa
Laura Scheel y Matt Grodsky se casaron el 30 de diciembre de 2016 en Arizona. Era una boda soñada. Después de dos décadas, Grodsky había cumplido su promesa de casarse con Scheel. En aquel momento todos sus compañeros pensaron que no era posible, pero finalmente pudo demostrar que lo que pensaba, se hizo realidad.
Para la pareja, lo más emocionante de la boda fue compartir un momento tan especial con amigos y familiares que amaban. Estaban muy agradecidos con las personas que los habían ayudado a unirse. Los recién casados se dirigieron entonces a su luna de miel con dirección a Maui.
22. Amor intacto
Al poco tiempo de casarse, Scheel tenía siempre muchas ganas de compartir su historia de amor con el mundo. Se decidió entonces a publicarla en Instagram. Esta posee actualmente una variedad de historias de amor y la forma en que se conocieron sus respectivas parejas.
Grodsky se decidió a comenzar publicando la forma cómo se conocieron y todo lo que les había sucedido durante los veinte años hasta su casamiento. Siempre estuvo enamorado de Scheel y su amor seguía intacto. Ambos pensaron que su historia le gustaría a la gente, pero nunca pensaron que tuviera tanta repercusión y aceptación entre sus seguidores.
23. Volviéndose viral
La publicación de Godsky tuvo enseguida más de 1.000 comentarios. La reacción de los usuarios fue todo una sorpresa para la pareja, ya que nunca habían pensado que su historia, la cual describía sus vidas desde el jardín hasta la secundaria, fuera tan aprobada por la gente.
Para ellos, el suceso resultaba normal ya que lo habían vivido en carne propia. Pero para otros resultaba todo una gran historia romántica. Grodsky está convencido de que se aprende a valorar a la otra persona una vez que se tiene una relación a distancia. Esto los ayudó a saber aprovechar y valorar el tiempo juntos.
24. Segunda luna de miel
La historia de Scheel y Grodsky se hizo tan viral, que hasta una personalidad famosa tomó contacto con ellos y les hizo una oferta muy tentadora. El conocido actor y rapero Tyrese Gibson leyó su historia en las redes sociales y quedó asombrado. Confiesa ser un loco por el amor y por esta razón les ofreció a ambos la oportunidad de irse de viaje durante tres días.
El destino era Miami, Florida, y los gastos estaban todos pagos. Tanto Scheel como Grodsky aprovecharon esta oportunidad y se fueron de vacaciones. Por supuesto que no perdieron la oportunidad de agradecerle este hermoso gesto públicamente.
25. Cuento de hadas
Tanto Scheel como Grodsky nunca imaginaron que su historia iba a tener tanta repercusión. Los dos lo toman con bastante naturalidad. Scheel ve su cara en Instagram y lo encuentra divertido. Ambos aprovecharon esta oportunidad para expresar lo que uno ama del otro. Scheel ama el sentido de humor de Grodsky, y él su sonrisa y amabilidad.
¡Actualmente cumplirán su tercer año de casados! Él trabaja en markting digital, mientras Scheel esta involucrada en una NGO. Y si bien desean tener hijos más tarde, toda su atención se la lleva actualmente su cachorro Kirby. ¡Esta es la historia de unos preesolares que parece haber sido robada de un libro de cuentos de hadas!
