Todos los humanos dormimos de formas diferentes. A algunas personas les gusta dormir sobre un colchón duro, mientras que otras personas prefieren una cama de más blanda. Pero, ¿sabía que hay una conexión entre su posición de dormir y su personalidad?
Investigadores, psicólogos y científicos del sueño han estado estudiando los patrones de sueño más comunes para obtener una primicia sobre lo que significan. Resulta que hay siete posiciones principales para dormir, y cada una puede decir mucho sobre la personalidad de la persona. Echemos un vistazo a cada posición, desde la más popular hasta la menos popular:
1º Posición fetal
La posición fetal es cuando doblamos las rodillas hacia el pecho como si estuvieramos metidos en una pelotita segura.
En un estudio realizado por Chris Idzikowski, director del Servicio de Evaluación y Asesoramiento del Sueño del Reino Unido, el 41% de los participantes dormidos adoptaron esta posición. De hecho, el doble de mujeres durmieron en posición fetal en comparación con los hombres en este experimento.
Aquellos que se sienten cómodos en esta posición pueden ser descritos como que tienen un caparazón duro: duro por fuera, pero muy blando por dentro. Típicamente son tímidos cuando se les conoce por primera vez, luego tienden a abrirse y relajarse rápidamente.
2º Posición tronco
15% de la gente parece perder el conocimiento en la posición del tronco (acostado de lado con los brazos y piernas extendidos) ¿Esta posición aburrida y rígida para dormir significa que la persona que duerme también es aburrida? Pues, la respuesta es: No! De hecho, es todo lo contrario.
Las personas que duermen como un tronco son conocidas como personas muy sociales y les gusta formar parte de círculos sociales. Aunque son amigables, despreocupadas y populares, estas personas sociales y confiadas son conocidas por ser muy crédulas, incluso con desconocidos.
3º Posición del orador o el anhelante
Con esta posición parecemos como si quisieramos alcanzar algo.
La posición del orador es en la que se duerme de lado (esta posición es muy similar a la del tronco), pero con los brazos extendidos frente a uno, por eso mismo el nombre de »orador.»
Las personas que duermen así tienden a ser un poco complicadas: son personas de mente abierta, pero cínicas; lentas y desconfiadas a la hora de tomar una decisión, sin embargo, se aferran a sus decisiones una vez hechas.
4º Posición del soldado
Exactamente como suena, la posición de soldado es donde usted duerme boca arriba con los brazos a los lados y estirados. Sólo el 8% de las personas afirman que duermen de esta manera.
De personas que duermen de esta manera se puede decir que son típicamente callados, reservados y tienen altas expectativas de sí mismos y de otras personas (con altos estándares y códigos morales estrictos).
5º Posición de caída libre
Esta posición es en donde usted se acuesta boca abajo con los brazos alrededor de la almohada y la cabeza volteada hacia un lado. Dormir boca abajo es algo que mucha gente encuentra incómodo, pero aquellos que disfrutan de esta posición no lo harían de otra manera.
Las personas que duermen en posición de caída libre son audaces y sociables por fuera, pero normalmente no tienen la capacidad de lidiar con críticas o situaciones absurdas.
6º Posición estrella de mar
Otra posición que se ve tal y como suena: la estrella de mar. Estas personas se extienden por toda la cama, cómodas y sin preocupaciones. Si usted es de los que se estiran así, lo más probable es que sea un gran amigo.
»Las estrellas de mar» siempre están a disposición de prestar una oreja o dar una mano a los amigos que necesitan ayuda. No necesariamente les gusta ser el centro de atención, pero no les importa si se encuentran allí de vez en cuando. Son personas prudentes, reflexivas y muy empáticas.
7º Posición de pensador
La postura del pensador es parecida a la de posición fetal.
Esta postura está es cuando la persona de lado, enroscada, con las rodillas dobladas hacia el estómago y los brazos levantados para descansar sobre la almohada, o con un brazo metido debajo de la almohada y una mano siempre cerca de la barbilla.
»Los pensadores» pueden cambiar rápidamente de una emoción a otra, lo que mantiene a los que los rodean en posiciones inestables. Son sensibles y necesitan estar rodeados de personas que sean pacientes y comprensivas.
