Skip to content

10 Signos de la enfermedad de Alzheimer

Bild: Atthapon Raksthaput / Shutterstock.com

El Alzheimer es el tipo más común de demencia. Los dos términos Alzheimer y demencia a menudo se utilizan erróneamente como sinónimos. Sin embargo, la demencia es solo uno de los síntomas que pueden presentarse en los pacientes durante el curso de la enfermedad. La enfermedad, en la cual se acumulan placas en el cerebro, generalmente ocurre con el aumento de la edad.

Aunque esta enfermedad cerebral todavía no se puede curar, es importante reconocer los síntomas a tiempo para mejorar la calidad de vida de los pacientes. En las siguientes páginas le mostraremos posibles advertencias sobre la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, dado que el curso de la enfermedad no sigue ningún patrón y hay diferencias individuales, los síntomas presentes también pueden tener una causa diferente y siempre deben ser discutidos con un médico.

1º Olvido

El olvido por sí solo no es de ninguna manera una señal de advertencia, pero no debe subestimarse. Cada uno olvida de vez en cuando dónde puso sus gafas o el nombre de un opuesto. Sin embargo, si este olvido ocurre con más frecuencia, puede ser un signo de enfermedad de Alzheimer.

Así, los afectados repiten a menudo sus preguntas porque ya han vuelto a olvidar la respuesta. Además, si los pacientes no acuden a las citas concertadas solo unos días antes, es útil utilizar libretas de apuntes. Aquí puede escribir fechas y tareas importantes para que no se olviden más tarde. A medida que la enfermedad progresa, esta pérdida de memoria empeora cada vez más, por lo que el tratamiento temprano es muy útil.

2º Falta de orientación temporal y espacial.

Uno de los mayores problemas de la enfermedad de Alzheimer es la desorientación temporal y espacial. Especialmente el reloj interno se ve afectado en los pacientes. Así olvidan qué día de la semana o del mes es o incluso en qué año se está actualmente. Por ejemplo, ya no sabes qué día es Navidad. Debido a la enfermedad, se acuerdan, por ejemplo, de épocas anteriores y, por lo tanto, consideran a sus propios hijos como amigos o hermanos.

Otros signos de demencia son los problemas de orientación espacial. A los pacientes les resulta difícil encontrar su camino en un entorno familiar. Por ejemplo, ya no conocen el camino de regreso a su apartamento o se pierden en su propia casa.

3º Aislamiento social

Bild: Stokkete / Shutterstock.com

A diferencia de un cambio de personalidad relacionado con la edad, en el que los pasatiempos anteriores se consideran agotadores, la enfermedad de Alzheimer puede manifestarse en una retirada repentina de la vida social. Dado que la enfermedad cerebral puede hacer que los pacientes de Alzheimer olviden cómo se realizan ciertas actividades, los afectados a menudo se alejan de las actividades sociales o deportivas. A menudo evitan el contacto con sus semejantes porque se avergüenzan de la enfermedad o tienen miedo de la vergüenza.

Los resultados del estudio muestran que el aislamiento social no solo es un obstáculo durante el curso de la enfermedad, sino que también puede ser una causa de la enfermedad.

4º Delirios

El curso de la enfermedad se caracteriza por una perturbación creciente de la memoria. Esto se puede expresar por el hecho de que los pacientes sufren de delirios y alucinaciones. Hay diferentes especies que pueden hacerse sentir de diferentes maneras. Si, por ejemplo, el paciente deja sus gafas en un sitio, luego se olvida de dónde las puso, y si estas posteriormente son encontradas por otra persona, puede que haga responsable a esta persona de robo o de habérselas llevado.

Por otro lado, también pueden ocurrir delirios como pensar que otras personas están escuchando lo que hacen o dicen o también se sienten perseguidos. El paciente oye de repente ruidos que le preocupan o ya no confía en sus cuidadores o en los miembros de su familia. Además, también se pueden llegar a ver diferentes personas que realmente no están allí.

5º Trastornos del habla

Pueden ocurrir varios trastornos del habla en el curso de la enfermedad. Por lo general, tienen problemas con su vocabulario o su capacidad para expresarse. Para comunicarse, los pacientes suelen utilizar palabras de sonido similar o palabras de relleno, porque ya no pueden recordar qué significado tienen las palabras o qué significan.

Esto también les dificulta la repetición de ciertas frases porque carecen de la comprensión lingüística necesaria. Las conversaciones a menudo son interrumpidas por largas pausas, porque piensan en lo que realmente querían decir. Debido a estos signos de enfermedad, se hace difícil entender a la persona, por lo que muchos pacientes evitan una conversación.

6º Falta de higiene

En el curso avanzado de la enfermedad, los afectados ya no pueden realizar las actividades cotidianas solos. Esto también incluye la higiene personal. Debido a su propio sentimiento de vergüenza, muchos pacientes no se preocupan por sí mismos porque se sienten incómodos al depender de la ayuda de otros. Un reto aún mayor aquí es el cuidado íntimo, el cual rechazan en primer lugar.

Esto también incluye el hecho de que los pacientes ya no pueden recordar la última vez que se ducharon o cepillaron los dientes debido a la enfermedad. Por lo tanto, es importante desarrollar una estrategia de solución para facilitar el cuidado diario.

7º Acumulación y extravío de objetos

Como se mencionó anteriormente, los pacientes de Alzheimer a menudo olvidan dónde se encuentran ciertos objetos o dónde los colocaron por última vez. En caso de pérdida, culpan a los demás por ello, por lo que empiezan a acaparar ciertos objetos para esconderlos de los familiares o ayudantes.

Sin embargo, a medida que olvidan dónde han escondido estas cosas durante el curso de su enfermedad, comienzan a buscarlas en varios armarios u otras instalaciones de almacenamiento. Durante la operación de búsqueda pueden llegar a desordenar mucho el apartamento. Como los afectados ya no recuerdan dónde tienen que ir los alimentos, también llegan a ponerlos en el armario en lugar de la nevera.

8º Problemas de decisión

Otros signos de la enfermedad de Alzheimer pueden ser cambios repentinos de personalidad. Además de los síntomas ya mencionados, a los afectados les resulta más difícil tomar decisiones durante el curso de la enfermedad. Si se ha diagnosticado una enfermedad en los afectados, se deben considerar varias opciones de apoyo.

En ciertas áreas, los pacientes ya no pueden tomar decisiones por sí solos, por lo que dependen de los cuidados. Esto significa que las personas afectadas no están solas en los nombramientos o decisiones importantes. También tienen problemas repentinos para elegir la ropa adecuada. Inadecuados a su comportamiento anterior, de repente se visten de una manera bastante colorida o van a la ciudad con su bata de baño.

9º Cambios en los hábitos alimenticios

Durante el curso de la enfermedad, el sentido del gusto y los hábitos alimenticios de la persona afectada también cambian. Aunque es normal necesitar menos energía en la vejez, es importante seguir una dieta equilibrada. Los cambios causados por la enfermedad se pueden notar de dos maneras diferentes.

Por un lado, los afectados a menudo olvidan que acaban de comer y, por lo tanto, repiten una comida varias veces al día. Por otro lado, la pérdida de apetito o la falta de sed también pueden ser otros síntomas de la enfermedad de Alzheimer. Los pacientes se sienten físicamente debilitados porque su consumo de calorías es demasiado bajo. Beber muy poco también aumenta el riesgo de confusión.

10º Discapacidad visual

En el curso de la enfermedad, las personas afectadas pueden sufrir trastornos de la visión. Incluso si los pacientes no necesitaban gafas hasta entonces, el deterioro visual puede ser otro signo de la enfermedad de Alzheimer. El defecto visual causado por la enfermedad puede manifestarse de diferentes maneras.

Por ejemplo, una alteración de la percepción del color o problemas con la determinación de los contrastes. Durante el curso de la enfermedad, los sentidos se deterioran cada vez más, de modo que los pacientes tienen dificultades para leer. Cuando la visión empeora cada vez más, las personas ya no son capaces de evaluar correctamente las distancias, de manera que derriban objetos o no llegan a alcanzarlos.